sábado, 27 de julio de 2013

Mulan

Cuando era pequeña mi película de Disney favorita era, sin lugar a dudas, Mulan. Hace no mucho hablábamos aquí de que ese tipo de preferencias no acaban cayendo en saco roto con el paso del tiempo. No sé si es cierto que llevamos un niño dentro; a mí, sinceramente, esas leyendas me importan poco. Yo lo llamo "nostalgia" o "cine": no soy una matrioska. 
El caso es que el otro día me dio por ver Mulan otra vez. Y, sinceramente, me sigue gustando. Recuerdo que en el post que le dediqué a Ratatouille os hablé de lo increíble que era poder retrotraerse unos años (los que sean) con una película: vivir de nuevo la más pura y genuina emoción del cine. 
Lógicamente, la experiencia ahora no puede ser la misma que entonces. Sin embargo, eso no significa necesariamente que tenga que ser peor, ni mucho menos. A mí me gusta recuperar los grandes clásicos de mi infancia porque ahora, por fin, puedo atisbar en ellos un fondo que en su momento me pasó desapercibido. En el caso de Mulan, por entrar en materia, este resulta especialmente sorprendente, sobre todo si lo comparamos con la tónica impuesta por otras heroínas de Disney anteriores y posteriores a la propia Mulan. Me refiero, como no podría ser de otra manera, a la princesa por excelencia: un perchero de su belleza sin un papel activo en su propia aventura. Afortunadamente las cosas han cambiado, aunque el cine en general todavía tiene mucho camino que recorrer.

2 comentarios:

  1. Qué coincidencia! También era mi película de Disney favorita. De pequeña, andaba corriendo por el prado con un palo jajaja. Era mi ídola.
    Saludos :)

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    1. Grande, Nienor jajaja
      Siempre es un gustazo encontrar más admiradores de Mulan. Gracias por pasarte :)

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